Llevar mentes creativas a la comunidad para que la ciudad vuelva a sentirse orgullosa

Jennifer Smith es la fundadora de Tortuga Escondida, una residencia artística con sede en Akumal, México. La intención principal del programa es ofrecer un espacio donde los artistas puedan reunirse y ser creativos a la vez que se inspiran.

"Todo el mundo tiene una cierta energía, como una cierta vibración, y cuando todos empiezan a trabajar juntos puedes ayudar a hacer crecer esa vibración. Y cuando se dispone de ese espacio propicio, creo que se abren ciertas cosas, no necesariamente en el cerebro, sino que se abren las posibilidades de que los jugos creativos fluyan", explica Jenifer Smith.

Y así es. Desde la creación de la residencia, la pequeña ciudad de Akumal y sus alrededores han cambiado drásticamente. Además, la organización del Festival anual de Akumal también ha tenido que ver con su transformación, ya que cientos de artistas callejeros han pintado la ciudad a lo largo de los años.

Ambos tienen un impacto directo en las comunidades locales, participando en la descentralización de la cultura y permitiendo un encuentro con las artes contemporáneas. "Ha habido mucho crecimiento, crecimiento social para los niños. Todos los niños que viven en Akumal se han beneficiado de clases impartidas por los artistas que han venido a hacer la residencia artística. Hemos tenido múltiples becas que han nacido de la residencia artística para los niños que viven en el pueblo. Sólo el impacto de todo el arte que han dejado los artistas ha transformado por completo la cara de nuestra pequeña comunidad", confiesa la fundadora.

La residencia desempeña un importante papel social y se ha convertido en parte de la cultura local, y "se puede ver un orgullo en el pueblo que antes no existía. De hecho, tienen mucho más orgullo y amor por su comunidad gracias al arte que les han otorgado los artistas residentes", concluye Jennifer Smith.